Con ellas apareció la figura del comerciante que antes no existía, porque era una sociedad básicamente de auto consumo, lo que se necesitaba se producía en el interior del mismo feudo “Do it yourself” y si algo no se lo podía auto abastecer, se hacían intercambios en especies. El dinero por lo tanto era bastante inútil en aquel momento y los consumos eran básicos. Estas ferias se fueron multiplicando a tal punto que los comerciantes iban de un lado a otro cubriendo su actividad comercial, algunas de ellas llegaron a ser muy grandes y debieron ser reglamentadas. Con las cruzadas, las ferias y los comerciantes se fortalecieron de una manera exponencial, los cruzados necesitaban quien los abasteciera por los caminos y después, esos miles de europeos que fueron a oriente generaron una demanda de todos los bienes que allí habían conocido y querían seguir disfrutando, lo que los comerciantes supieron bien satisfacer. Con el tiempo esos comerciantes, sus organizaciones y sus burgos terminaron por romper los muros del Feudalismo dando paso a un nuevo sistema económico que en el tiempo se conocería como El capitalismo.
Al igual que en aquel momento, pienso que hoy día los mercados locales y las ferias agroecológicas que estamos viendo surgir en los últimos años, son espacios físicos en los cuales se está fortaleciendo una parte del nuevo modelo económico que se está gestando dentro de un nuevo paradigma de convivencia planetaria. Estas ferias y mercados locales a los que me estoy refiriendo, tienen unas características comunes: son de proximidad, locales, con productos ecológicos y de temporada, en los que hay una consciencia y una búsqueda por un mejor estar en este planeta. El consumidor que los visita normalmente es consciente de la importancia de la alimentación en su salud y del modelo agroecológico para el cuidado del medio ambiente, por lo tanto, es un consumidor que quiere conocer todos los detalles del producto, esto hace que la venta de los productos implique una acción educativa e informativa por parte del productor. El alimento es el punto de encuentro.
Neus Monillor en entrevista realizada por sostenible.cat dice que “El alimento es un vínculo con la Tierra” y efectivamente es un vínculo con la red de vida que nos mantiene y nos transforma, somos lo que comemos, por lo tanto si comemos tóxicos, nuestros cuerpos estarán intoxicados y poco saludables, si comemos sano, saludable, nuestros cuerpos igualmente lo estarán. La alimentación es un vínculo muy fuerte con la vida, las especies vivas todas necesitan alimentarse. En las ultimes 6 décadas lo que hemos comido en nuestras mesas viene de la agroindustria, con todos los daños que ha venido provocando en nuestra salud y en el Medio Ambiente por ser un sistema de agricultura altamente contaminante del toda la red de la vida y su baja calidad alimenticia”.
Cuando hablamos de la red de la vida, estamos haciendo referencia a la esencia del nuevo paradigma de convivencia planetaria (Biocivilización), una red que es en sí misma, un organismo vivo, interconectado, interdependiente e interrelacionado, del cual hacen parte los seres humanos, las plantas, los animales y la Madre Tierra, como ser igualmente vivo. Al estar entretejidos de esta manera, nos afectamos mutuamente de una forma u otra, con nuestros actos cotidianos, uno de ellos sin duda y muy importante es la alimentación y la producción de los alimentos que consumimos. Somos un solo organismo vivo.
Dentro de esta idea, es clave el papel que juegan los productores y productoras en la generación de un alimento de calidad, ecológico y de proximidad. Práctica a la cual han vuelto muchos y muchas por consciencia y necesidad de contactar de una manera más cotidiana con el origen. Lo anterior los ha ido llevando a través de los últimos tiempos a desarrollar o recuperar formas diferentes de producir dentro de los marcos de la agroecología, la mayoría de los casos por iniciativas personales o familiares que han ido construyendo un conocimiento de cómo hacerlo a partir de las prácticas y del aprendizaje que en tal sentido todavía conserva la humanidad. Para que estos conocimientos se sigan fortaleciendo de una manera más rápida y sólida, se necesitan espacios de encuentro, donde el intercambio del cual estamos hablando se dé de una forma más rápida. Aquí es donde los mercados locales y las ferias agroecológicas, juegan un papel muy importante
Recordemos como con la aparición del comercio se fueron transformando las prácticas cotidianas y económicas en el corazón de la vida medieval. La riqueza en aquel momento histórico la marcaba la propiedad de la tierra, ella determinaba la dimensión del poder y quien lo ejercía, en ese momento de la historia lo ostentaban y ejercían los señores feudales y la Iglesia. Cuando se fortaleció la actividad comercial alrededor de los feudos termino por romper el sistema económico feudal, el valor dejo de estar en la tierra y paso a estar en el dinero, entonces los deseos de poder y de libertad tanto de campesinos como de burgueses ayudo a consolidar el paso a un nuevo periodo de la historia.
Para terminar, creo que es importante que se sigan fortaleciendo y multiplicando los mercados locales y las ferias agroecológicas como focos nodales de encuentro, dialogo, intercambio de servicios y de saberes. En ellos veo que se van fortaleciendo las personas, al tiempo que se está contribuyendo al fortalecimiento desde la base y la cotidianidad, de una economía diferente a la dominante, más horizontal y humana, en la cual la red de la vida es el centro o la esencia de la dinámica económica.
Con esto quiero decir que un nuevo modelo de producción y agricultura ecológica comprometido con el cuidado de la red de la vida, está tomando forma y fortaleciéndose en diferentes escenarios, uno de ellos son los mercados locales y las ferias agroecológicas, gracias al creciente número de productores, productoras, consumidores y consumidoras conscientes y de otros factores que presionan a un cambio en la manera como convivimos y en las formes de organización humana de manera inmediata, entre ellos el Cambio Climático que ya se hace sentir en nuestras vidas con rigor.
Sandra Campos, Humanista, eco activista, directora del Seminario Internacional de Convivencia Planetaria Biocivilización www.biociviliacion.org Productora del Ghee Caldes d’Estrac, alimento 100% de proximidad, ecológico y artesanal.
Foto tomada de: IAlimentos
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